Alrededor de las 21:00 del 26 de enero de 1700, el noroeste del Pacífico experimentó uno de los terremotos más grandes de la historia. Se cree que fue comparable al terremoto de magnitud 9.2 del 27 de marzo de 1964 en Alaska y al terremoto de magnitud 9.2 de 1960 en Chile. La tierra tembló durante cinco minutos y provoco un tsunami que avanzó peligrosamente por Océano Pacífico, llegando hasta la costa este de Japón. Los investigadores creen que el terremoto estaba vinculado a la zona de subducción de Cascadia. La zona de subducción es el área donde se superponen la placa tectónica de Juan de Fuca y la placa norteamericana. Después del megaterremoto, la costa a lo largo del noroeste del Pacífico llegó a caer hasta 2 metros.
Y desde entonces no ha habido un terremoto en la zona de subducción de Cascadia. Los científicos dicen que un terremoto de magnitud 8.0 o superior ocurre cada 250 años. Esto significa que podría ocurrir un terremoto a gran escala en cualquier momento y en cualquier punto del planeta. Y los fuertes eventos sísmicos que están habiendo en muchos lugares del mundo parecen ser una clara evidencia de que está a punto de ocurrir una gran catástrofe sísmica. Y, por si fuera poco, los científicos han confirmado que una misteriosa onda sísmica se había extendido por todo el mundo el 11 de noviembre de 2018.
Misteriosas ondas sísmicas
Según los expertos, las extrañas ondas se desencadenaron inicialmente en Mayotte, una isla francesa situada entre África y el extremo norte de Madagascar. Su presencia se sintió en países africanos como Kenia y Etiopía, que luego cruzaron los océanos y llegaron hasta Nueva Zelanda, Canadá y Hawái. Además, las ondas no fueron de corta duración y duraron aproximadamente 20 minutos en cada ubicación detectada.
Pero lo más sorprendente es que los sismólogos no fueron capaces de detectar el extraño fenómeno, más bien fue un usuario de Twitter llamado “@matarikipax” quien descubrió los misteriosos zig zags en la pantalla del sismograma en tiempo real del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) y luego los publicó en su cuenta.
¿Actividad volcánica o misteriosas olas provocadas por terremotos?
Después de analizar las pantallas del sismograma, Göran Ekström, sismólogo de la Universidad de Columbia, dijo que nunca antes había visto algo parecido, según informó National Geographic. Algunos expertos creen que las extrañas y misteriosas olas podrían ser el resultado de un terremoto. Sin embargo, las ondas que se originaron en Mayotte parecen ser monocromáticas, y el sismógrafo mostró un zigzag limpio dominado por un tipo de onda que tardó 17 segundos en repetirse. Curiosamente, la mayoría de los terremotos suelen enviar ondas con diferentes frecuencias, y ese no fue el caso de Mayotte.
Por lo que algunos investigadores creen que los volcanes en Mayotte podrían estar iniciando su actividad, y este ruido es una clara señal. Se basan en que Mayotte se formó debido a una actividad volcánica, pero ninguno de los volcanes en la isla o el océano cercano ha entrado en erupción en los últimos 4,000 años.
La predicción se hace realidad
Hace unas semanas, Frank Hoogerbeets, el prestigioso investigador de terremotos que dirige el sitio web “Ditrianum: Global Earthquake Forecast”, predijo que un megaterremoto sacudirá nuestro frágil planeta el próximo período navideño. Según Hoogerbeets, Mercurio, la Tierra, Marte, Júpiter y Venus se alinearán el 21 de diciembre, lo que provocará un “tirón gravitatorio” que desencadenará en un potente y destructivo terremoto de más de 8 en la escala de Richter. Según los cálculos del investigador, el megaterremoto ocurrirá probablemente entre el 21 y el 25 de diciembre de 2018.
“Una configuración planetaria muy crítica el 21 de diciembre de 2018 probablemente provocará un gran terremoto entre el 21 y el 25 de diciembre de 2018”, dijo Hoogerbeets. “La estimación actual es de una magnitud alta de 7 a 8. Esta es una advertencia muy oportuna porque muchas personas en todo el mundo ya están preparando sus vacaciones de Navidad.”
Y las misteriosas ondas sísmicas son una evidencia de que la predicción de Hoogerbeets se está haciendo realidad. Aunque no sería la única que acaba cumpliéndose. El investigador predijo con éxito el terremoto ocurrido el pasado 5 de agosto en la costa de la isla indonesia de Lombok, cerca de Bali, donde murieron unas 37 personas. Pero cabe decir que, aún así, para los científicos no es suficiente. Nos dicen que no es posible predecir terremotos y mucho menos por la posición de los planetas. Aunque, tal vez los sismólogos deban de hacer caso a otras evidencias, como el manantial fangoso que se mueve misteriosamente a un ritmo extremadamente rápido a través de la tierra seca en el mar de Saltón: primero fueron 18 metros en unos pocos meses y luego más de 18 metros 60 en un día.
Inminente apocalipsis
A medida que los científicos parecen estar sorprendidos y no se ponen de acuerdo con las misteriosas ondas que se detectaron en todo el mundo, algunos teóricos de la conspiración aseguran que estos fenómenos están señalando un inminente apocalipsis. Para ellos, estos pequeños movimientos símicos son un presagio de un megaterremoto en todo el planeta.
Y el origen del aumento en la actividad sísmica seria Nibiru, el supuesto planeta errante que ya se encontraría en nuestro sistema solar. La fuerza gravitacional de Nibiru sería tan fuerte que estaría alterando la órbita y la estabilidad de nuestro planeta. O tal vez tenga que ver con el huracán de materia oscura, que los científicos nos dijeron no veríamos ni sentiríamos. Quién sabe.
La verdad es que no se sabe el origen de estas misteriosas ondas símicas, pero lo que está claro es que los científicos no habían visto nada igual en su vida. Lo mas sencillo es no darle importancia, pero tal vez sea la señal definitiva de que el mundo se está a punto de enfrentar a un megaterremoto potencialmente destructivo, y que miles, sino millones de personas podrían perder sus vidas.
¿Estas preparado para el megaterremoto? ¿Estamos viviendo los últimos días de la Tierra? ¿O eres de los que piensas que no hay que darle tanta importancia?
Si hay que darle importancia en el sentido que debemos estar preparados para tratar de salvar nuestras vidas, por algo, es menester tener a la mano por lo menos una botella de agua,…
Anoche soñé que caía una lluvia de enormes meteoritos del tamaño de autos sobre Longchamps, provincia de Buenos Aires… ¡Quedan avisados! 😉
Para los que no sean capaces de leer un articulo (que tardas como mucho 5 minutos) y se quedan con el titulo les explico que los sismólogos no fueron capaces de detectar el extraño fenómeno, fue un usuario de Twitter quien descubrió los misteriosos zig zags en la pantalla del sismograma en tiempo real del Servicio Geológico de los Estados Unidos y luego los publicó en su cuenta. La cuestion es si ¿los sismologos no lo detectaron o lo dejaron pasar a proposito?
A ver, soy de los que piensa que toda ayuda. Si es verdad que antes algo funcionó bien se debería de prestar un poco de atención. Y creo que estas ondas sísmicas tienen relación con los recientes terremotos.