El Proyecto Montauk es una teoría de la conspiración que se basa en un supuesto proyecto secreto del gobierno de Estados Unidos que involucraba a niños secuestrados, experimentos de control mental y viajes en el tiempo. Y durante mucho tiempo las escalofriantes historias sobre los siniestros acontecimientos en la base militar Camp Hero en Montauk han sido consideradas como una leyenda local. Si eres un fan de la serie de ciencia ficción Stranger Things, entonces todo esto te resultará familiar. Lo que muchos de sus seguidores desconocen es que la popular serie de Netflix, ganadora de un Emmy, es que está basada en hechos reales.
Más que ficción
Stranger Things, protagonizada por Winona Ryder, ha regresado con una nueva temporada, aunque el titulo original era Montauk. Pero los creadores, los hermanos Matt y Ross Duffer, decidieron cambiar el título y la ubicación de la serie a la ciudad ficticia de Hawkins, Indiana. Y no han explicado el por qué.
La primera temporada se centraba en un niño perdido atrapado en otra dimensión, una chica con un poder psíquico llamada Eleven que escapa de un laboratorio secreto de investigación del gobierno, donde tienen lugar oscuros experimentos que desencadenan en un monstruo que aterroriza la ciudad. Cualquier persona puede pensar que solamente se trata de una serie de ciencia ficción, pero la realidad es que se basa en el escalofriante Proyecto Montauk.
Stranger Things y el Proyecto Montauk
El teórico de la conspiración Chris Garetano, que creció cerca de Camp Hero, afirma que durante la última década han ocurrido “cosas extrañas” en el lugar, incluyendo secuestros de niños e incluso viajes en el tiempo. La antigua estación de radar de la Guerra Fría en Montauk, estado de Nueva York, ha sido objeto de rumores y teorías de conspiración desde que cerró en la década de 1980. Son mucho los habitantes que han oído hablar de científicos del gobierno que realizan experimentos con niños secuestrados y contacto con extraterrestres.
Fundamentalmente, se dice que la torre de radar Sage tiene la capacidad de transmitir la frecuencia necesaria para afectar la conciencia humana. Un ex trabajador también describió el funcionamiento de la “silla Montauk”, un dispositivo para leer la mente, y que en uno de los experimentos que una vez invocó accidentalmente a un monstruo con la imaginación de un sujeto, que luego explotó en la base aérea. El ex trabajador, llamado Preston Nichols, dijo que había portales de viajes en el tiempo que succionaban gente a un lugar y tiempo diferente.
En su libro publicado en 1992, «The Montauk Project: Experiments in Time (El Proyecto Montauk: Experimentos en el tiempo)», Preston afirma que el Congreso de los Estados Unidos se mostró cauteloso con el desarrollo de técnicas de control mental y cerró la investigación. Sin embargo, los militares tomaron el control del lugar y permitieron que los científicos cambiaran su ubicación al ya desaparecido Camp Hero.
Otro dato interesante es que desde el Proyecto Montauk surgió el Experimento de Filadelfia en 1943, que supuestamente iba a hacer que el destructor de la Armada de los Estados Unidos USS Eldridge fuera invisible para los radares. Pero lo que ocurrió fue complemente diferente, el barco desapareció temporalmente en una dimensión o tiempo diferente, junto con su tripulación.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el gobierno de los Estados Unidos experimentó con sus propios ciudadanos, incluidos los aviadores de Tuskegee, un grupo de aviadores afroamericanos, quienes fueron infectados deliberadamente con sífilis y no fueron tratados. Otros afirman que la CIA ejecutó un programa de control mental llamado MK Ultra en los años 1950 y 1970. Supuestamente probaban cómo las drogas LSD podrían usarse para extraer información o borrar recuerdos.
Otro proyecto que se llevó acabo en las infames instalaciones fue el Proyecto Stargate, un plan de la CIA para ver si los espías podrían usar sus capacidades psíquicas como la clarividencia. Uri Geller fue uno de los primeros psíquicos que participaron. Otra teoría afirma que miles de niños fueron secuestrados y sometidos a técnicas de control mental para crear un ejército de soldados durmientes llamados los “niños Montauk”. Stewart Sweadlow afirmó que, en 1970 cuando tenía 13 años, fue secuestrado en varias ocasiones para el Proyecto Montauk.
Al parecer, utilizaron niños de familias desestructuradas y finalmente decidieron que las personas con cierta genética eran propicias para los experimentos más avanzados. Con todos esos niños, sus recuerdos fueron borrados, su genética alterada y no siempre podían recordar lo que sucedió. Únicamente recordaban lo sucedido en forma de pesadillas o recuerdos. Aunque en algunos casos no podían borrar la memoria, estos se convertían en una anomalía y eran eliminados.
En la actualidad, la antigua base es ahora un parque estatal lleno de excursionistas, pero algunas partes cercanas a las antiguas instalaciones militares y búnkeres permanecen selladas y protegidas. Sin embargo, Garetano asegura que algunas de las siniestras actividades aún podrían estar ocurriendo. Así, que la próxima vez que veas Stranger Things podrías formar parte de algún tipo de experimento psicológico del Proyecto Montauk.
Para mi que Hopper viaja en el tiempo en la temporada 4
Al final los que salen perdiendo son los pobres niños que no tienen culpa de nada y los tratan como si fueran muñecos de usar y tirar. Alguien tendría que pararles los pies a esos monstros.