En Mundo Esotérico y Paranormal hemos hablando en varias ocasiones sobre peligrosos asteroides que se acercaban a nuestro planeta. Hasta ahora hemos tenido suerte, pero son muchos los investigadores los que llevan tiempo advirtiendo sobre los riesgos potenciales de una colisión de asteroides. Basándose en simulaciones por ordenador se ha descubierto que los asteroides pueden causar mucha más destrucción si se estrellan contra el suelo o explotan en el cielo, en lugar de impactar contra el mar provocando un tsunami. Y como era de esperar, los investigadores también encontraron que los asteroides más grandes representan un mayor riesgo que los más pequeños. Sin embargo, las rocas espaciales que son más pequeñas que unos 40 metros de diámetro tienen más probabilidades de explotar en el aire, lo que representa un riesgo diferente para las personas que se encuentren debajo.
Incluso así no podemos subestimar el poder destructivo que provocaría una gran ola por el impacto de un asteroide. Conseguiría matar a millones personas que se encuentren lo suficientemente lejos de la bola de fuego y la sobrepresión. Pero un tsunami tardaría mucho tiempo en extenderse a lo largo de un gran océano, dando a las personas la oportunidad de salvarse huyendo hacia tierras más altas. Pero no te preocupes, porque la comunidad astronómica nos dice constantemente que no hay ningún asteroide en curso de colisión contra la Tierra. ¿Pero cuanta credibilidad tienen estos “expertos”? Pues a raíz de un reciente incidente, podemos decir que muy poca.
Los científicos anunciaron el descubrimiento de un peligroso asteroide horas antes de su acercamiento. La roca espacial en cuestión era el Ok 2019, de unos 100 metros de ancho y pasó el jueves por la noche a una distancia de 70.000 kilómetros de nuestro planeta. Y lo más sorprendente de todo es que tenía el tamaño suficiente para devastar una ciudad entera.
El misterioso asteroide Ok 2019
Alan Duffy estaba confundido. El jueves, el teléfono del astrónomo no paraba de sonar con llamadas de periodistas que querían saber acerca de un gran asteroide que acababa de pasar por la Tierra, y no pudo entender por qué todo el mundo estaba tan alarmado.
“Pensé que todos se estaban preocupando por algo que sabíamos que iba a ocurrir”, dijo Duffy, quien es el científico principal de la Royal Institution of Australia, al The Washington Post.
This is the video of the close encounter of Asteroid 2019 OK we have been Twitting all day with the Earth: https://t.co/bjT7uhQJuO pic.twitter.com/3e4UyPcdPl
— ASAS-SN (@SuperASASSN) 25 de julio de 2019
Los expertos ya pronosticaron que unos asteroides pasarían relativamente cerca de la Tierra esta semana. Luego, buscó los detalles de la roca espacial llamada asteroide Ok 2019.
“Me quedé atónito”, dijo el profesor Duffy. “Esto fue un verdadero shock.”
Este asteroide no era uno de los que los científicos habían estado siguiendo, y aparentemente había aparecido “de la nada”, dijo Michael Brown, de la escuela de física y astronomía de la Universidad de Monash, al Sunday Morning Herald. Según datos de la NASA, el asteroide era grande, con un ancho estimado de 57 a 130 metros, y se movía rápido, pasando a tan solo 73.000 kilómetros de la Tierra.
“Nos sorprendió rápidamente”, dijo el profesor Brown. “La gente solo se da cuenta de lo que sucedió bastante después de que ya pasó por delante de nosotros”.
La presencia del asteroide fue descubierto solo a principios de esta semana por equipos de astronomía independientes en Brasil y los Estados Unidos. La información sobre su tamaño y trayectoria se anunció unas horas antes de que pasara cerca de la Tierra.
Entonces, ¿cómo pasó el evento casi desapercibido?
El principal problema fue el tamaño. El asteroide Ok 2019 tenía un dimensión considerable, pero no tan grande como para causar una extinción masiva. La “órbita excéntrica” y la velocidad del asteroide también han sido factores que han influido en su “no detección”. Otro detalle ha sido su velocidad. Cuando se acercaba a la Tierra, el asteroide viajaba a unos 24 kilómetros por segundo. En contraste, otros recientes asteroides que pasaron cerca de la Tierra viajaban entre 4 y 19 kilómetros por segundo.
La detección de último minuto es otro signo de cuánto queda por conocer el espacio y nos recuerda la amenaza real que los asteroides pueden representar. La NASA esta trabajando en el desarrollo para desviar asteroides potencialmente peligrosos. Una estrategia consiste en empujar suavemente el asteroide y alejarlo de la Tierra. El otro es el tractor de gravedad. Si se detecta un asteroide lo suficientemente temprano, podría ser posible desviarlo utilizando la gravedad de una nave espacial. Pero parece ser que antes de nada deberían ser capaces de detectarlos a tiempo.
Porque si el asteroide Ok 2019 hubiese impactado contra nuestro planeta, sus restos habrían llegado al suelo, resultando en un daño devastador. Hubiese sido similar a la explosión de un arma nuclear muy grande, con suficiente fuerza para destruir una ciudad. Los astrónomos y agencias espaciales han perdido credibilidad en lo referente a los asteroides. Si nos dicen que no hay posibilidad de impacto, entonces deberíamos pensar todo lo contrario.
¿Estamos realmente en peligro? ¿En cualquier momento una gran roca espacial impactará contra la Tierra y no nos avisarán a tiempo?